miércoles, 18 de junio de 2008

Bingham en Ollantaytambo



Cuando el historiador norteamericano, Hiram Bingham III, regresa al Perú en 1914 a continuar sus exploraciones en Machu Picchu, se establece en Ollantaytambo, para lo cual, alquila por medio de sus colaboradores, la casa de don José Manuel Zamora y esposa doña Gumercinda Galdo, ubicada en Araccama, “tras el Sagrario”. El arrendamiento se realiza directamente “al Señor Prof. Hiram de la Universidad de Yale”
La mencionada casa era conocida como la “Casa Horno”, por que ahí funcionaba un horno donde se elaboraban panes y en su “canchón” se encontraba la fuente conocida como el “Baño de la Ñusta”, la cual fue objeto de algunas fotografías de Bingham.

El contrato de arrendamiento firmado el 26 de febrero de 1915, por el representante de Bingham y miembro de la expedición, Osgood Ardy (uno de los topógrafos de la expedición), describe la situación de la vivienda y se acuerda una “mensualidad de veinte soles pagaderos cada fin de mes, principiando a correr por cuenta del arrendatario desde el primero de marzo del presente año con periodo de un solo año”. Firman como testigos, don José Miguel F. Baca, don Valentín Martínez, don Eliseo Pareja, ante el Juez de Paz don Tadeo Flórez. De dicho documento, hay dos versiones conservadas por don Mariano Salas, una manuscrita y un resumen mecanografiado, en papel membretado como “THE PERUVIAN EXPEDITION OF 1914-15 under the auspices of YALE UNIVERSITY AND NATIONAL GEOGRAPHIC SOCIETY. Hiram Bingham, Director”.

Ya próximo a concluir el contrato de arrendamiento, y con el fin de hacer cuentas sobre la inversión realizada en el acondicionamiento de la casa, uno de los representantes de Bingham, en una carta mecanografiada, al parecer de noviembre de 1915, escribe lo siguiente:

“Señor Jose Zamorra.
Gobernador de Ollantaitambo.

Muy estimado Señor y amigo-

Me encuentro U. preparando para hacer viaje mañana a Cuzco
Llevando a la vez unos veinte cajones de tiestos.
Antes de partir para Cuzco Quiero hablar con U. sobre la cuestión
De las mejoras que hemos puesto en esta casa, hablo principalmente
de la maderaje y la calamina.
Como estoy tan ocupado yo, encajonando tiestos, y, otros
cosas, le escribo este carta para suplicarle si no podia U. venir
a casa esta tarde a tomar una botella de Cerveza y al mismo tiempo
ablar del cuestion de la madera y calamina.

Siempre Su Atta Servidor y Amigo

Geoffrey W. Moskhill”

La expedición de Bingham, durante su estadía en Ollantaytambo, realizó estudios, toma de fotografías y elaboró el primer plano de la población. Por la carta que antecede, se puede deducir que también realizaron trabajos de excavación en Ollantaytambo, fruto de lo cual se enviaron las mas de veinte cajas con tiestos y “otras cosas”, cuyo destino se desconoce. Suponemos que los tiestos son de origen ollantino; por cuanto, el material colectado en Machu Picchu debe haber sido transportado directamente al Cusco, sin escalas innecesarias en Ollantaytambo.

Ya es tiempo que la Universidad de Yale, no solo devuelva los materiales arqueológicos que se despacharon, sino permita que los archivos de Bingham estén a disposición de los investigadores peruanos y peruanistas.